6 de junio de 2011

MAGRAS DE JAMÓN CON TOMATE



Esta es otra de las recetas que he heredado de mi abuela, que de pronto puede parecer simple por el clásico combinado de pan, jamón y tomate, pero os puedo asegurar que al ir el pan cocinado como de torrijas, le da un puntito súper especial, junto con la salsa.

Para hacer las magras con tomate necesitaremos:

-        Tomate frito casero, no vale el de bote, ah, sería un pena (podéis ver la receta en mermeladas y conservas)
-        Una rebanada gruesa de pan por cada comensal (duro, del día anterior mejor)
-        1 loncha gruesa de jamón serrano por cada comensal, del tamaño de la rebanada
-        leche
-        huevos
-        azúcar
-        sal
-        1 vaso de vino

Empezaremos por el pan. Tenemos que trabajarlo como si fuésemos a hacer una torrijas, pero sin azúcar. Mojamos las rebanadas de pan en leche hasta que estén blanditas, luego las pasamos por huevo, y las vamos friendo en la sartén, a fuego medio, hasta que estén doradas. Las vamos colocando una vez fritas en una fuente.



Podemos prepararlo con tiempo si tenemos que cocinar otros platos, dejarlo en la nevera y meterlo al horno ya cuando lo vayamos a comer. Si va a ser en el ahora, ponemos ya el horno a calentar a 250º.

Cubrimos todas las torrijas con la salsa de tomate frito.




Seguimos con el jamón, el que utilicemos para esta receta debe estar muy tierno, cuanto más crudo mejor, de lo contrario nos quedará seco y saladísimo. Colocamos una loncha gruesa sobre cada torrija de pan, en la fuente, que ya estaba con el tomate frito.






Por ultimo hacemos la salsita para rematar. Ponemos dos cucharadas grandes de azúcar en una sartén a fuego suave y cuando empiece a fundirse, ¡ojo! que nos se queme ni que se haga caramelo, en cuanto empiece a fundir, le echamos el vaso de vino y dejamos reducir para que evapore el alcohol y el azúcar cree textura cremosa con el vino. Añadimos una pizca de sal.

Sencillito, ya tenemos la salsa lista, sale poca cantidad, pero porque la idea es simplemente cubrir como con una cucharadita de esta salsa cada magra, algo muy sutil.

Finalmente hay que introducirlo en el horno y dejamos hasta que veamos que el jamón ha cambiado un poco de color, pero que no se queme ni se tueste demasiado. Esto es poco tiempo, depende de la fuerza de cada horno, en el mío 5 minutos aproximadamente.

Servir con un buen vino tinto y ¡a comer!



¡Ah! Un ultima recomendación, mi abuela siempre hace una magra para cada uno, y dos o tres mas de propina para todos, por las que nos damos tortas, así que si sois de buen comer, dos por persona es perfecto ;)

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